A dos voces
No hay más soles
ni lunas en que recostarse,
ni un rayo de astros
sobre el que, a dos voces
lamentar,
se perdió en lo etéreo
del olvido
la estrofa, la rima, el cantar.
Acuérdate amor
de ese poema bien
forjado
lleno de luz y de sol,
los viajes no realizados
sueño incorpóreo,
vaga pasión.
Acuérdate amor
del día celeste,
corona de olivos
cantos de ruiseñor,
recuerdo amor
los vastos campos
y tus pasos
sobre flor...
Es un placer leer tus exquisitas y apasionantes letras María Mercedes. ¡Olé! a ti poeta. 🌹🌹
ResponderEliminarFrancisco, agradezco tanto tus comentarios, me ayudan a seguir escribiendo.
EliminarSaludos!