Más allá de lo posible…


Lienzo: Pardillo muerto. John Atkinson Grimshaw 

Cuando la brisa
ya no circunde 
los lirios,
cuando el viento sigiloso
se detenga a pensar
sobre su destino,
cuando calle el reloj,
cuando fenezca la vida…

Cuando llegue la obscuridad
apresurada, desmedida,
cuando el día no atreva
a rozar los caminos,
cuando mi sangre 
en tu recuerdo 
no calcine mis venas,
cuando a mi cuerpo 
lo invada el frío,
cuando muera el tiempo
cuando muera la vida…

Cuando mi corazón no encuentre
el palpitar de tu poesía,
cuando extienda la mano 
y solo encuentre vacío,
cuando el ruiseñor no cante más
el aria de tu sonrisa
y muera la alondra 
sola en su nido,
cuando el minutero exhale
su último suspiro…

Cuando mi llanto 
evapore en mi garganta
y mi pluma sea cárcel 
de silabarios omitidos,
cuando no puedan mis rimas
decirte más „Amor“
en silencio, sin sonido,
entonces…
Ya estaré volando 
ya iré por el camino
pero te seguiré amando
aun, cuando la cigarra desgarre
su tórrido tañido,
aun cuando la muerte
me lleve en sus alas
te seguiré adorando,
dormida…

Comentarios

  1. ¡Hermoso Mercedes!, una sinfonía de amor más allá de la vida. De lo más lindo que has escrito. Hasta me obligas a pasar por alto el uso incorrecto que haces de ciertas formas verbales.

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias don Julián. El uso incorrecto es a propósito, son las pequeñas libertades que se toma el autor, aunque comprendo que un filólogo no lo acepta.
    Saludos

    ResponderEliminar
  3. Bueno, me consuela saber que al menos tienes intencionalidad al utilizar mal ciertos verbos, "las normal están para incumplirse" dijo un día alguien, doña Mercedes, pero eso no impide que a los incumplidores se les siga metiendo a la cárcel, jajajajaja. ¡Feliz finde "señá" poeta!

    ResponderEliminar
  4. Muchas gracias Miquel, me alegra encontrarte
    por aquí en mi Blog.
    Saludos, MM

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares